Generalmente, son de comportamiento pacífico -aunque suele ocurrir que los machos entablan peleas inofensivas- y no existen problemas mientras convivan con otros peces de actitud similar. Su naturaleza movediza y la vivacidad de sus colores lo han convertido en uno de los peces más populares y preferidos por los aficionados.

Sus gustos alimenticios se componen de gusanos, crustáceos, insectos y hojuelas, variando entre estos alimentos con el fin de conseguir una dieta balanceada.
El abdomen de estos peces se caracteriza por ser más convexo que su lomo y además poseen una aleta dorsal de gran tamaño. Las hembras platy son siempre más grandes que los machos.
Usualmente las hembras alcanzan los 6 cm y los machos solo llegan a los 3,5 cm. Sin embargo, los machos poseen colores más llamativos que le sirven para cortejar a la hembra en época de reproducción. Sus colores son combinaciones de tonos amarillentos, verdosos y anaranjados, y tienen una mancha oscura amorfa en el cuerpo.
El macho de esta especie empieza el cortejo exhibiendo sus aletas frente a la hembra, la cual de aceptar la proposición se detendrá y permanecerá inmóvil durante unos cuantos segundos, tiempo que le permitirá al macho llevar a cabo la copulación y como consecuencia la transmisión de espermatozoides. Pasadas de 4 a 6 semanas, la hembra busca un lugar alejado y allí pare los pequeños peces recién nacidos a los cuales deja a su suerte o devora en el peor de los casos. De 10 a 80 alevines son expulsados del interior de la madre, totalmente formados y autosuficientes luego de unos momentos. Pasados 8 meses, los alevines alcanzan su período de madurez sexual.