Un veterinario llegó presuroso al poblado de Bunawan, en la provincia de Agusán del Sur, para revisar al cocodrilo de una tonelada luego de que se ladeó con el abdomen inflamado dentro de su jaula en un parque ecoturístico. El reptil fue declarado muerto unas horas después, dijo el alcalde de Bunawan, Edwin Cox Elorde.
La organización de los Récords Mundiales Guinness declaró al gigantesco animal el cocodrilo marino en cautiverio más grande del mundo el año pasado, cuando registró 6,17 metros de largo.
Las autoridades dijeron que tratarán de determinar la causa del deceso del cocodrilo, que se presume tenía más de 50 años.