Existen diferentes tipos de galgos, pero por lo general son delgados y largos; se caracterizan por su agilidad en el momento de la caza, por esta razón los utilizaban para ir por presas tanto grandes como pequeñas, ya que sus habilidades lo hacían ser el perro perfecto para las cacerías.

Los galgos son realmente llamativos por su combinación entre belleza, fuerza, acción, destreza, flexibilidad y coraje; estas son algunas de sus características más representativas. Aunque cabe resaltar que en el transcurrir del tiempo se convirtieron en una buena opción para tener como mascota, porque son dulces y pacientes. Además se adaptan fácilmente a la vida familiar, es un perro que como muchos no le gusta estar solo bastante tiempo; por lo tanto disfruta con la compañía de las personas que estén en casa, les gusta estar en lugares que son acogedores para descansar.
Es importante que lo lleves de paseo, así sea corto para que se ejerciten, pero deberás tener en cuenta que por naturaleza corren con gran velocidad, así que lo más recomendable es que lo lleves con su correa de paseo especial para galgos. También deberás tratarlo con mucho amor y respeto ya que ellos te responderán con fidelidad y ternura, ofreciéndote una gran compañía como mascota.
De igual manera es una raza que necesita espacios grandes por su tamaño, es decir, no son para tener en lugares pequeños como los apartamentos. También deberás tener en cuenta que requieren los mismos cuidados del veterinario como cualquier otro perro; debes cuidar de su salud, ya que podrían llegar a padecer de enfermedades de huesos o displasia de cadera por ser perros grandes. Es un perro dócil, gentil y fácil de educar por un entrenador, tienden a llevarse bien con otros animales y mascotas.